Tres ejes como la comedia, la vida y la risa han vertebrado algunas de las reflexiones más potentes en torno al cine. Así, por ejemplo, las implicaciones sociales de la comedia italiana, o las de un filme como Los caballeros las prefieren rubias, que según Jonathan Rosenbaum señalaba como el Potemkin del capitalismo; o las implicaciones morales, que el acto de hacer reír expresa, que simbolizan e interiorizan una serie de circunstancias que son y no son tan de hacer reír, sea en la España del desarrollismo (¡que vienen las suecas!) o en la América del desamparo emocional (las complejas comedias de Frank Tashlin). En otras palabras, la risa y la comedia podrían definirse como el espacio geográfico de nuestras vidas.
En La comedia humana nos proponemos elaborar una serie de lecturas que adviertan aquellos gestos adheridos junto a la idea de hacer reír. Desde Chuck Jones señalando que en la base de las acciones del Coyote había una fuerte influencia de la ética de George Santayana a la hora de dar cuenta de la tenacidad en sus tentativas de atrapar al correcaminos, hasta la comedia que el cine clásico y silente desarrollaba, entre gestos y cuerpos al límite, para hablar de la condición humana.